Hacia tres meses que habia dejado de verla. En ese lapso recupere mis estudios de preparación que perdi en aquel otro lugar en donde la conocí. Sin embargo parece ser que las condiciones no eran las mas adecuadas y luego de tres meses el grupo que deje alla llegó a donde yo estaba, entre ellos, ella.
Era de las mas aplicadas, delgada y espigada su cabello era castaño y tenía una carita graciosa en donde destacaban sus labios de "carmin". Me gustaba mucho desde que la vi, a pesar de ser delgada tenia un bonito cuerpo. Interiormente, era sencilla y a veces, bastante ingenua.
- Hola Lucho!!! mira que linda sorpresa. Estamos juntos todos otra vez,
- Si, que bueno verte de nuevo
- ¿me extrañaste?
- si
- Y porque nunca me fuiste a ver entonces?
Y mientras recibia una avalancha de suaves reclamos, sus labios de carmin no perdian la sonrisa. Le di un beso de bienvenida, y de paso para que parara de hablar, solo que mi beso fue largo y luego de darselo deje mi mejilla acariciando la suya, y mis labios cerca a los suyos.
Estupefacta y sin reacción por algunos segundos, solo exhalo un suave suspiro invitandome a seguir besandola. La mire a los ojos y me volvió a preguntar "¿porque nunca me fuiste aver?"
No era el momento de dar explicaciones ni de desviar mi energia en ella por mas que quería. Me esperaba la universidad y no iba a dejarla pasar. Ella tampoco, aún asi, su mirada en mis ojos todos los dias me lo advertia.
Aquel verano de octubre a febrero la deje pasar, arriesgando que no me entendiera y se fuera con otro. Pero no paso asi. Tenia un compromiso conmigo mismo, tenia que demostrarme que servia para algo ingresando a la universidad. No tenia tiempo para ella.
Llego febrero, el dia "D", y ambos logramos lo que nos propusimos. Ahora seria diferente, en la universidad.
Era de las mas aplicadas, delgada y espigada su cabello era castaño y tenía una carita graciosa en donde destacaban sus labios de "carmin". Me gustaba mucho desde que la vi, a pesar de ser delgada tenia un bonito cuerpo. Interiormente, era sencilla y a veces, bastante ingenua.
- Hola Lucho!!! mira que linda sorpresa. Estamos juntos todos otra vez,
- Si, que bueno verte de nuevo
- ¿me extrañaste?
- si
- Y porque nunca me fuiste a ver entonces?
Y mientras recibia una avalancha de suaves reclamos, sus labios de carmin no perdian la sonrisa. Le di un beso de bienvenida, y de paso para que parara de hablar, solo que mi beso fue largo y luego de darselo deje mi mejilla acariciando la suya, y mis labios cerca a los suyos.
Estupefacta y sin reacción por algunos segundos, solo exhalo un suave suspiro invitandome a seguir besandola. La mire a los ojos y me volvió a preguntar "¿porque nunca me fuiste aver?"
No era el momento de dar explicaciones ni de desviar mi energia en ella por mas que quería. Me esperaba la universidad y no iba a dejarla pasar. Ella tampoco, aún asi, su mirada en mis ojos todos los dias me lo advertia.
Aquel verano de octubre a febrero la deje pasar, arriesgando que no me entendiera y se fuera con otro. Pero no paso asi. Tenia un compromiso conmigo mismo, tenia que demostrarme que servia para algo ingresando a la universidad. No tenia tiempo para ella.
Llego febrero, el dia "D", y ambos logramos lo que nos propusimos. Ahora seria diferente, en la universidad.